Resurgiendo de las sombras: El proyecto Viesques de Iroca

A escasos minutos del corazón de Gijón, donde el tiempo había dejado su huella en forma de estructuras abandonadas, nace el proyecto Viesques de Iroca. Este ambicioso emprendimiento no solo está destinado a completar la construcción de dos bloques de viviendas y zonas comunes, sino que también representa un renacimiento para una edificación que había sido olvidada durante más de una década.

Viesques no es solo un proyecto de finalización de edificio; es un testimonio de lo que la colaboración y la dedicación pueden lograr. Desde su concepción, este proyecto ha sido un esfuerzo conjunto entre el promotor, los arquitectos, la dirección facultativa y la empresa constructora. Todos unidos con un objetivo común: devolver la vida a un espacio que había sido dejado en el olvido.

La tarea no fue fácil. Nos enfrentamos al desafío de rehabilitar una estructura abandonada, marcada por el paso del tiempo. Pero con determinación y visión, logramos transformar lo que una vez fue una iniciativa olvidada en un símbolo de revitalización urbana.

Uno de los aspectos más destacados de este proyecto es su complejidad geométrica. Se trata de la rehabilitación de un edificio preexistente de composición curva, lo que añadió mayor nivel de dificultad al proceso. Sin embargo, gracias a la dedicación de nuestros arquitectos, Nicolás Arganza y Lorena Sánchez, y nuestro arquitecto técnico, Jaime Vila, logramos superar cada obstáculo que se interponía en nuestro camino.

La tarea de urbanización no fue menos desafiante. Debíamos conectar de manera fluida los bloques de viviendas y diseñar un espacio común que fomentara la interacción entre los residentes. Para lograrlo, apostamos por una combinación ingeniosa de elementos arquitectónicos, y utilizamos hormigón visto ranurado y palillería metálica en diferentes áreas.

El resultado final cumplió todas nuestras expectativas. Las fachadas onduladas, resueltas mediante un panel ranurado de cemento reforzado HD, dominan la composición y atraen las miradas. Por todo ello, esta edificación fue galardonada con el prestigioso premio Plomadas de Plata en 2018, un reconocimiento que premia el intenso trabajo y la atención al detalle que se ha invertido en cada aspecto estético de la iniciativa.

Ubicado en Avenida Mar Cantábrico 8A, 8B y 8C y Calle Gloria Fuertes 35, 37 y 39, el proyecto Viesques no solo representa un hito en el desarrollo urbano de nuestra ciudad, sino también un ejemplo inspirador de lo que es posible cuando la creatividad y la colaboración trabajan unidas.